El walkman

Ayer el Walkman de Sony cumplió 30 años.

Ahí donde lo véis, se vendieron más de 380 millones de estos cacharritos.

Hoy en día los MP3 se han hecho con todo el mercado de la música, pero apuesto a que nuestra generación no le olvidará. Yo soy más bien tardía, pero lo usé, lo usé: tuve dos, y el último le he estado usando hasta hace bien poquito. Como nunca tuve discman, tenía que grabarme en casa los discos que me gustaban en una cinta, para escucharla en el walkman.
Así de cuca soy yo: pasé directamente del walkman al MP3. Y aún los conservo, pues es una auténtica reliquia que enseñar a futuras generaciones.

Ayer, con motivo del aniversario, sacaron un walkman a la calle y le preguntaban a los niños qué era; lo sujetaban entre las manos como si de un ovni del área 51 se tratara, y decían: "sé que sirve para escuchar música, pero no sé lo que es". ¡Qué lástima de generación Pokemon! que vienen con el Ipod y la PlayStation bajo el brazo!. La que digo, yo no pienso dejar a mi hijo que se acerque a una consola, a un móvil o a un ordenador hasta que haga los 15 años. Por mucho que me diga que sus amiguitos del cole lo tienen, y se ponga como se ponga. Menuda soy yo, hombre ya.


Lo estuve comentando ayer con Ovejita, y llegamos a la conclusión de que tenemos que hacerle un homenaje al walkman, todo un icono de la década de los 80: enfundémonos nuestros pantalones pitillo desgastados! calcémonos nuestras Converse! saquemos la heroí....digooooo la chupa de cuero y volvamos a sacar el walkman a la calle! ;)