Slumdog Millionaire

El otro día, en la entrada de Trainspotting, hice referencia a Slumdog Millionaire, y la verdad es que luego cuando lo leí me dí cuenta de que quedó bastante despectivo, y tampoco es eso hombre.

En mi opinión, no llega a la altura de Trainspotting (las comparo porque son del mismo director, pero no debería, ya que no tienen absolutamente nada que ver la una con la otra) pero Slumdog Millionaire brilla con luz propia. Y me alegro mucho de que se llevara 8 de los 10 Oscar a los que estaba nominada (incluyendo los "gordos": mejor película y mejor director). Dando así un patadón en la boca al cine comercial (que a veces me satura incluso a mí) y bajando los humos a las endiosadas estrellitas (véase el asqueroso de Brad Pitt, por mencionar uno) que piensan que sólo por ser guapos ya se van a llevar la estatuilla. Y sacando mi vena maligna...no sabéis lo que me alegré de que El Curioso Caso de Benjamin Button se comiera los cagaos. Lo siento mucho, Forrest Gump y Big Fish sólo hay una. Los que las intentan copiar se pegan la leche. Esto es así.

Slumdog Millionaire no es un drama, no es una comedia, no es una película de acción, tampoco de amor...es todo junto; Danny Boyle ha sabido meter todos esos géneros en una batidora y lograr que ninguno de ellos destaque por encima del otro: sabe sacarnos la lagrimita cuando la situación lo requiere, y también la pequeña risa en el momento justo.

Por si alguien aún no lo sabe, la película cuenta la historia de Jamal (interpretado en la edad adulta por Dev Patel. Una vez más hago apología de mi peculiar gusto en lo referente a los hombres y recurro one more time a la expresión pija; decidme lo que queráis, pero me parece supermono xD), un joven analfabeto de 18 años, criado en un barrio marginal de Bombay, que se presenta al concurso ¿Quién quiere ser millonario?, con la esperanza de que el gran (y perdido) amor de su vida, Latika (Freida Pinto en edad adulta) le vea en el programa, y así volver a encontrarse.

Por un cruce de casualidades, todas las preguntas que le hacen a Jamal han tenido algo que ver a lo largo de toda su vida, así que conoce todas las respuestas...o casi todas. La suerte también juega un papel importante. Y así, como bien dicen en la peli, mientras médicos, abogados, ingenieros, etc, no pasan de las 250.000 rupias, Jamal ya va por los 10 millones.

En mi humlide opinión, la primera media hora de la película es un poco zzzzz (ojo, que no es lo mismo que aburrida, es un grado menos xD). Eso sí, el momento "hombre mierda" no tiene desperdicio xD. Pero luego coge el ritmo para ya no soltarlo hasta el final.

Pero si hay algo por lo que realmente merece la pena ver Slumdog Millionaire es por la preciosa escena final, todo un canto a la vida y a la importancia del destino que emociona y conmueve.

Eso sí, algo malo tendría que tener: estaba yo moqueando como siempre y con los ojos perlados con el final de la película, y casi me caigo patas arriba (como en los dibus japos) al ver los créditos finales, con los protagonistas bailando a lo Bollywood. Eso sobraba completamente. Mal, Danny, mal ;)


Los que la hayáis visto...escribidme comentarios de esos largos que tanto me gustan, jeje. Y los que no, como digo siempre...ya tardáis!