Penurias desde la cuarentena

Pues aquí estoy, un día más. Esta vez aquejada de un virus o vete tu a saber qué, que me tiene sin poder comer nada sólido desde el pasado viernes. Creo que de tanto beberlo voy a acabar odiando el Acuarius. Mi piel ha adoptado un enfermizo color blanquecino (con pequeños toques morados) que agravan mi ya de por sí extrema palidez. Nadie, salvo mi madre, se atreve a acercarse a mí a menos de dos metros de distancia, por temor a que les contagie. Las tripas me rugen y no puedo hacer nada para evitarlo. Y por si fuera poco, lo que hace una semana era lo que más ilusión me hacía en el mundo (empezar a trabajar) hoy me parece un auténtico lastre. Mañana por la tarde empiezo mi jornada laboral, y mi cuerpo sólo me pide un buen sofá (y comida).

Como si no meto mi chorrada como piano no me quedo tranquila...ayer estuve viendo, por millonésima vez, "Top Secret", un buen ejemplo para demostrar que sí es posible que una peli sea mejor cada vez que la ves. Y además me vino bien, pues el ver a mi querido Val cantando y bailando, hizo, al menos por un momento, que mi enfermiza palidez se convirtiera en un sonrojo acompañado de grandes sofocos y golpes de calor interno.

Cuando sepa poner videos de Youtube en el blog, en la próxima entrada pondré los números musicales de la peli. No tienen desperdicio. Ya lo creo que no...ejem...buf!

Y por último...muchisisisisimas gracias a Pato por comentarme en la entrada anterior. Un bico y welcome to my blog!