jueves, 29 de enero de 2009

Vincent

Vincent Malloy tiene siete años,
es un niño amable pero algo huraño.
Es bueno, obediente y muy educado,
pero él quiere ser como Vincent Price, su idolo soñado.

No le importa vivir con su perro,su gato y su hermana,
aunque preferiría compartir casa con murciélagos y arañas.
Allí jugaría con los horrores que ha inventado,
y vagaría por los oscuros pasillos, solo y atormentado...

Cuando viene su tía, Vincent parece un cielo.
Pero se imagina sumergiéndola en cera hirviendo para su museo.
Hace experimentos con su perro Abocrombie,
con el fin de crear un horrible zombie.
Con ese espectro terrorífico para los hombres,
buscaría sus víctimas por la niebla de Londres...

Pero él no solo piensa en crímenes violentos,
¡Vincent pinta!
y de vez en cuando lee cuentos.
Mientras otros niños leen tebeos de acción,
a Vincent es Edgar Allan Poe quien llama su atención.
Una noche, cuando leía una historia horripilante,
algo le hizo palidecer al instante.
Con tamaño disgusto su vida quedó derrumbada,
pues su bella esposa viva fue enterrada.

Debía cerciorarse de que había muerto,
e intentando desenterrarla destrozó las flores del huerto.
Su madre lo envió a su cuarto como castigo,
desterrado en sus sueños a la torre del olvido.
Sentenciado a pasar el resto de su vida,
con el retrato de su amada que fue enterrada viva.


Y mientras lloraba, sumido en la desesperación
apareció su madre en la habitación.
Le dijo: "Si quieres puedes salir a jugar.
Hace un día estupendo, lo puedes aprovechar."


Vincent trató de hablar,
pero no pudo.
Los años de aislamiento lo volvieron casi mudo.
Así que cogió su pluma y se puso a escribir:
"¡Estoy poseído por esta casa!
¡Nunca volveré a salir!."


Su madre le contestó:
"¡Ni estás poseído ni estás medio muerto!
¡Este juego tuyo es solo un invento!.
Eres Vincent Malloy, no eres Vincent Price.
¡Y no estas loco ni atormentado, caray!
Tienes siete años y eres mi hijo.
Vete a jugar con otros niños, ¡te lo exijo!"
Y tras este toque de atención abandonó la habitación.


Pero cuando vincent trato de sobreponerse,
las paredes empezaron a moverse.
¡Crujían, temblaban!
Y su horrible locura la cima alcanzaba.
Vio a Abocrombie, su terrible esclavo.
Y su mujer lo llamaba desde el otro lado.
De la tumba nacían sus ecos
y de las paredes surgían manos de esqueletos.
Todas las desgracias que sus sueños atormentaban
entraron en su vida mientras él gritaba.


Trató de escapar, de huir del horror,
pero su mustio cuerpo se derrumbó por el dolor.


Y débilmente, casi sin voz,
recitó El Cuervo, de Edgar Allan Poe:
"Y mi alma, esa sombra que allí flota fantasmal...
no se alzará
...nunca más..."









La perfección poética y cinematográfica en 6 minutos


miércoles, 28 de enero de 2009

Primeras palabras

Hace cosa de una semana, estaba leyendo mi "Fotogramas" con mi periquito Piticli en el hombro. Hasta ahí todo normal, ya que desde hace una buena temporada se pasa más tiempo fuera de la jaula que dentro (sólo la usa para comer, beber y dormir por las noches). O en mi hombro, o saltando por los sofás, picando el pan (y lo que le pongas por delante) cuando comemos, intentando aterrizar en el lomo de mi perrita Sara, etc...
Tampoco me sorprende cuando se pone a murmurar por lo bajinis, como si estuviera refunfuñando. Lo que sí me sorprendio fue descubrir la palabra "hola" en mitad de ese palrucheo que se trae. No lo dijo tan claro como si saliera del pico de un loro, pero lo suficientemente nítido como para que yo pudiera entenderlo.


Con el culo torcido me quedé, había oido por ahí que los periquitos (al ser mini-loros) también podrían llegar a hablar si se les enseñaba. Así que a partir de ese día comencé mi cruzada particular para arrancar más palabras del piquito de Piticli.
En una semana he hecho bastantes progresos, pronuncia (cuando le da la gana, eso sí, no cuando le hablas) además de "hola", las palabras que yo le repito una y otra vez para que las diga:


- "Besito": esto es porque me da besitos en la mejilla, y yo siempre le estoy diciendo "besito"

- "¿Qué tal?": él mismo se autocontesta diciendo otras veces...

- "Muy bien"

Y la que más picueta me dejó:

- "Kelso": esta no se la digo yo, sino que la oye de la tele cuando estoy viendo "Aquellos Maravillosos 70". Kelso es el apellido del personaje de Ashton Kutcher, y como nunca le llaman por su nombre (Michael) repiten Kelso muchas veces a lo largo del episodio. Piticili lo oye, y lo suelta xD.
Por mucho que intento que me conteste "Piticli" cuando le pregunto cómo se llama, nada, Kelso pa arriba y Kelso pa abajo. No me extraña dicho sea de paso, ya que por culpa de mi hermano, que le llama Pericles, y yo, que para abreviar le llamo Pit, el pobre tiene que tener un lío de nombres que pa qué. Pero tiempo al tiempo, si he conseguido que diga todas esas cosas, algún dia le sacaré un "Piticli", jeje.


Otra característica, no sé si buena o mala, de Piticli, es que está demasiado "enmadrao" conmigo. Supongo que será porque soy la que más tiempo pasa con él. Si no estoy en el salón empieza a piar con todas sus fuerzas hasta que voy. Entonces se calla y empieza otra vez con el palrucheo. Sólo come de mi mano, sólo se sube a mi hombro, sólo me habla a mí. Con tanto amor "pajaril" compenso el vacío que me hace la perrita, ya que pasa de mí como de la M, salvo cuando tengo comida, eso sí, que viene cagando leches la jodía.
En fin, que como lo de Kelso lo sacó de la tele...alomejor le tengo que poner el sketch de Enjuto Mojamuto en el que dicen su nombre, a ver si lo repite!


lunes, 26 de enero de 2009

Y la cosica se hizo hombre

Ahora que todo ha pasado me tomo la libertad de hacer bromicas, pero la verdad es que es algo muy serio. Hace poco mi primo el mayor (para mí, junto con su hermana, los ÚNICOS primos que tengo) tuvo un accidente con una de las máquinas con las que trabaja, que a punto estuvo de costarle los dedos anular y meñique de la mano derecha. Pero por suerte, pararon la máquina a tiempo, y ya se está recuperando. Es una rehabilitación bastante puñetera, pero lo que importa es que la cosa no fue a más.
La última vez que hablé con él, poco antes de Val-nochevieja, me dijo que cuando se le pasaba el efecto de los calmantes le dolía tanto la mano que no podía dormir. Y a mi mente cinéfila le faltó tiempo para establecer el simil: lo mismito que Christian Bale en "El Maquinista". Aunque él no lleva un año entero sin dormir, y desde luego no está tan flaco xD. Desde entonces, y de forma cariñosa, llamo a mi primo El Maquinista, jeje.

Esta tarde he estado haciendo un revisionado de la susodicha peli. La verdad es que, aún a pesar de saber lo que va a pasar al final (yo al menos lo saqué rápido) está bastante interesante y te sabe mantener en tensión. Y ahora es cuando me refiero al por qué del título de mi entrada: un tiarrón (y qué tiarrón...ejem) de 1.86 como Christian Bale, se quedó en 54 kilos para hacer esta película. ¿Quieren perder peso? preguntenle a Chris: sólo comía una lata de atún y una manzana al día, y calmaba el hambre fumando. Y aún así, el señor no estaba contento y quería bajar a 50 kilos, pero la productora se lo prohibió rotundamente. Si ponía en peligro su vida (sin ápice de exageración) al quedarse en 55...en 50 ya ni te cuento. Vamos, que se pone de lado y ni se le ve...



No me extrañaría en absoluto que en los colegios, para las clases de conocimiento del medio, usaran un fotograma de esta peli en lugar del típico esqueleto que hay en las aulas. Cuesta creer que tras este...cuerpo...se esconda el mismo actor que encarnó al despiadado pero tremendamente sexy Patrick Bateman, o más recientemente, a Bruce Wayne / Batman.




Volviendo a la peli...aparte de que te pases los 20 primeros minutos con el morro arrugao en plan "uuugh" al contemplar impertérrito la anatomía del señor Bale (esa clavícula parece que está a punto de salir disparada cual boomerang)...tiene ciertos aires hitchcocknianos que resultan bastante interesantes. También un toquecito Fincher, y hasta aquí puedo leer.
Otra característica de la peli es que lleva el misterio hasta ese punto de la entropía que se encuentra entre el terror y el suspense. Sabes que va a pasar algo, pero no sabes cuándo ni cómo. Esto, siendo algo imprescindible para una buena película de misterio que se precie, a mí me resulta catastrófico, ya que yo me asusto hasta de mi sombra (literalmente, el grito que pegué una vez al ver mi sombra en el suelo fue...lo que no está escrito) y lo paso bastante mal cuando se acerca alguna de esas situaciones de tensión.
Fue una película sencilla, sin gran publicidad, de producción española. En la taquilla pasó más bien desapercibida, pero no para la crítica. Jennifer Jason Leigh y Aitana Sánchez Gijón (que aprenda la *****sdfuerwfneroifhruwcvnpijwiefmrgmaksd**** de Penélope Cruz a pronunciar el inglés como ella) aprueban con nota. Pero es un inmenso (en sentido figurado xD) Bale quien merece todos los alagos. Muchos críticos (y yo también) auguraban para él una más que merecida nominación al Oscar, que al final no se cumplió. Pero de todas maneras, hace tiempo que he dejado de creer en Hollywood...Penélope está nominada, con eso os lo digo todo. El tío Oscar no puede caer más bajo. Miento, sí puede caer más bajo: si la estatuilla acaba en sus manos.
En fin, que desde aquí mi pequeño rincón cinéfilo, recomiendo "El Maquinista". Aquí dejo el trailer




jueves, 22 de enero de 2009

Un año sin Heath

Aún estaba contenta de mi "encuentro" Tim Burton, cuando recibí el chasco. También, esta vez por desgracia, me acuerdo como si fuera ayer:


Eran algo más de las 10 de la noche, y me encontraba navegando en el foro de cine al que soy asidua, cuando de repente veo un post nuevo: "Muere Heath Ledger", decía. No puede ser, me dije a mí misma. Entré en el post, pensaba que era alguna forma de hablar o alguna broma pesada, pero no. Aún albergaba la esperanza de que fuera algún falso rumor como tantos otros que prodigan por internet (como cuando dijeron que Orlando Bloom la ha palmado y ahí le tenéis, vivito y coleando).
Aquella noche apenas pude dormir, y me levanté temprano para estudiar y para ver las noticias de la mañana, a ver si decían algo. Efectivamente, en todas las cadenas se hicieron eco de la noticia. Ya no había posibilidad de error.

Heathcliff Andrew Ledger nos había dejado.
Mucho se especuló sobre su muerte (y esas especulaciones aún continúan, un año después); que si sobredosis, que si suicidio...lo único que yo tenía claro es que se me rompía el corazón cada vez que veía en la televisión la imagen de la camilla con un saco negro, iluminada por cientos de flashes, saliendo del apartamento. Tengo esa imagen clavada en la cabeza y no se me va a olvidar jamás.



Los días posteriores entré como en una especie de shock: a mi mente no le daba la gana aceptar que había muerto. Me puse algunas de sus películas seguidas ("Casanova", "El Secreto de los Hermanos Grimm", "10 Razones para Odiarte"...) y como si nada. Incluso sonreía! pues para mí no había muerto. Pero en el fondo, creo que sabía que sí había muerto. Incluso me costaba mucho concentrarme a la hora de estudiar, lo que me costó algún que otro suspenso.


Pero lo peor vino algunos meses después, cuando se iba acercando el estreno de "El Caballero Oscuro". Ahí fue cuando realmente acepté del todo que Heath había muerto.

Llamadme loca (one more time) o exagerada, pero he perdido la cuenta de lo que lloré cuando fui consciente de lo que había pasado. De verme sus películas seguidas pasé a no poder ver ni siquiera una foto suya, porque me echaba a llorar. Ahora mismo, al escribir esta entrada, se me están cayendo unos lagrimones como puños.
Esta mañana tenía un examen, pero en el huequito de mi mente, junto con Platón y su teoría de las Ideas, Aristóteles, Sócrates, Parménides, Tales, Anaxágoras, Protágoras...se encontraba Heath. En mitad del examen no he aguantado más y he empezado a llorar en silencio y con cuidado de que nadie me viera. Quizá, como única nota positiva, es que esta vez he clavado el examen ;)

Y ahora mismo se acaba de hacer pública su nominación al Oscar. ¡A por ellos, Heath!
Al menos nos deja como legado una niña preciosa (que es su viva imagen) y un montón de magníficas interpretaciones. Nunca caerá en el olvido.


No me enrollaré mucho más. Sólo me queda decir una cosa...puede que la mayoría le recuerde como "el que hacía del Joker" o "el vaquero mariquita de Brokeback Mountain". Pero yo le recordaré, simplemente, como Heath Ledger.

Te echamos de menos

Y ya por último...os dejo con esta simpática escena de "10 Razones Para Odiarte". Que levante la mano la que no querría estar en la piel de Julia Stiles!!:




Hasta siempre, Heath

miércoles, 21 de enero de 2009

21 de enero de 2008

Me hago viejuna. Todo el mundo dice que conforme te vas haciendo mayor, los años se te pasan cada vez más deprisa. Y aterrada me he quedado al comprobar esta mañana que eso ya me está ocurriendo a mí: me da la sensación de que fue ayer, y sin embargo ya ha pasado todo un año desde que vimos a Tim Burton.
Tal día como hoy hace un año, a esta hora, acababa de recibir (mediante mi hermano) la noticia de que Tim Burton había venido a España a presentar "Sweeney Todd". Así que llamé ipso facto a Dave y nos fuimos cagando leches para la FNAC, a ver si, por alguna obra divina, aún quedaba algún pase para la rueda de prensa.
Tal y como temíamos, los 40 pases ya habían sido adjudicados. Y de hecho, los 40 frikis góticos con pintazas (era para verlo, de verdad, me da vergüenza decir que soy fan de Tim Burton cuando a todo el mundo le viene a la cabeza esos "personajillos" con la expresión "fan de Tim Burton"). Incluido el tío gordaco ese que salía en los Serrano. Verlo en persona te deja un poco flipado...joder, qué...robustez.

Pero aún así no nos rendimos, y alrededor de las 16.30 nos plantamos en frente del cine Palacio de la Musica. Era tan pronto que el escenario para el preestreno y tal aún no estaba montado. Pero nos dio igual, nos apoyamos en la valla y de ahí ya no nos movió ni dios. Como eramos los únicos que llegaron a esa hora, tuvimos todo el sitio del mundo para escoger, y elegimos un lugar estratégico e inmejorable: primera fila justo al lado del paseillo por donde Tim tenía que pasar para entrar al cine.
La gente se empezó a arremolinar alrededor de las 17.00. A mi lado se puso un chaval que, a pesar de que no se callaba ni debajo del agua, me cayó bien.

Empieza a anochecer. Entre los que se nos van uniendo a las vallas y entre los curiosos transeuntes que se paran a mirar qué pasa (hacían las típicas preguntas tipo: "¿Qué pasa aquí leñe?" o "Quién viene?? quién viene? que me quiero enterar!") la marabunta de gente ya es más o menos considerable. Los que estaban montando el escenario nos dijeron que Tim llegaría alrededor de las 22.00. Miré el reloj...eran las 19.00. Y a esto hay que añadirle las dos horas y media que ya llevabamos allí. No es de extrañar que mis piernas, y sobre todo mi espalda, empezaran a resentirse de estar de pie y parada tantas y tantas horas, pues no nos atrevíamos a movernos por miedo a que nos quitaran nuestro lugar estratégico digno del Risk. Y bueno, del frío que hacía ya ni hablamos...

Empecé a ponerme nerviosa según se acercaba la hora, llamando cada dos por tres a mi hermano, que traía mi libro de Tim y todas las carátulas de los DVD's que le dio tiempo a coger, para ver si llegaría a tiempo.
Ya son las 22.00...actores y famosetes varios (de esos que no tienes muy seguro qué narices pintan allí, como por ejemplo Marlene Moureau, entre otros) empiezan a aparecer y a poner su ¿mejor? cara para el photocall. Entre los actores que asistieron estaba María Valverde, que se acercó al chico que no se callaba para firmarle un autógrafo. Por lo visto María tenía dos entradas de sobra, y se las ofreció, pero el chico ya tenía...entonces Dave no se cortó un pelo y dijo: "nosotros no tenemos". Y María, todo lo maja que es ella, nos las regaló!! qué mona!
A estas alturas mi hermano ya había llegado, pero entre él y nosotros habría unas 80 personas, y no se pudo unir a nosotros, quedándose un poco más atrás.

Y al fin, con media hora de retraso, llega Tim...camara en mano, levante el brazo todo lo que pude, y esto es lo que capté (el del circulo rojo es Tim xD)



Mientras Dave sostiene los cartelitos de "Sweeney Todd" el edding y que nos han dado, yo no doy a basto para hacer fotos (sabemos coordinarnos y repartirnos las tareas xD). Pasa a escasos metros de nosotros, y se va a firmar autógrafos justo al lado opuesto. Picuetos nos quedamos, pero tampoco nos rendimos esta vez: no habíamos estado allí 6 putas horas para nada (aunque bueno, yo con verle ya me habría conformado, jeje) así que empezamos a gritar "Tim, please!" con todas nuestras fuerzas una y otra vez (incluido el chico que no se callaba). Y...no es por nada, pero si no llega a ser por nuestros gritos, ni se acerca. Al fin, nuestra garganta irritada, nuestra espalda destrozada y ¿nuestras? (yo ni las sentía ya, como Rambo) piernas vieron recompensado todo su esfuerzo. Este es el momento en que nos está firmando...CON MI EDDING!!:



Dios mío, Tim Burton ha cogido mi edding. Le guardo como una auténtica reliquia, que pasara a manos de mis hijos, y de mis nietos...eso si no pido que me entierren con él xD.
Ya me podía morir tranquila, que había conseguido un autógrafo de mi director favorito (en la foto, con las entradas que nos dio María):



La gente empieza a disolverse: los curiosos se van, y los fans que tienen entrada se meten al cine. Y ahora se nos presentaba un problemón: sólo teníamos dos entradas y, contando a mi hermano (que ya se había podido reunir con nosotros)...eramos 3. Supongo que fue la emoción y el cansancio de aquel día, pero ahora que lo pienso...pasado un año, no sé en qué coño estaba pensando cuando me sacrifiqué para que mi hermano pudiera entrar.
Es un poco raro, ¿no? fui yo la que estuvo allí plantada durante 6 horas aguantando el dolor y el frío...y luego llega él, no estuvo allí ni dos horas...y sin embargo es el que entró al cine. Lo sé, SOY GILIPOLLAS. Y más gilipollas me sentí cuando le pregunté qué tal...y me dijo que volvieron a ver a Tim dentro de la sala, antes de que empezara la peli.
Pero bueno, así de altruista soy yo. Y nunca se sabe cuando te va a hacer falta eso de "andaaaaa, encima que te dí mi entrada de Sweeney Todd". El chantaje emocional puede llegar a ser un arma muy poderosa.
Me acojona a mísma el hecho de pensar en cómo hubiera reaccionado si también hubiera venido Johnny Depp.
La sensación de "viejunez" (palabro recién inventado) se acrecenta cada vez que paso por el Palacio de la Musica (que ya está cerrado) y veo lo abandonado que está: medio desmontado y lleno de polvo. Como si hubiera pasado una década en lugar de un año. Nos invade la nostalgia cada vez que pasamos por allí, jeje.
Pero en fin, supongo que si lo recuerdo como si fuera ayer, es porque también lo recuerdo como uno de los días más divertidos y memorables de mi vida.

Toda esa alegría se desvaneció al día siguiente, cuando recibí uno de los peores "shocks cinéfilos" que podía recibir :(
Pero hablaré de eso mañana, que es cuando toca.


martes, 20 de enero de 2009

¡Qué malo es el miedo!

Esto es algo así como mi entrada de los topicazos navideños tontunos, pero con el miedo:

Por la noche, estás en la cama y oyes un ruido extraño. ¿Qué haces? Te tapas con la sabana. Genial. ¿Qué pasa? ¿Que la sabana es antibalas? ¿Que si viene un malo con un cuchillo no va a poder atravesarla? ¿Que se le va a doblar la hoja?

¿Y cuando nos da por mirar debajo de la cama?. Que ya tenemos una edad, por dios. Además, suponiendo que haya un asesino debajo de la cama, ¿qué ganas mirando? Que te mate antes. O en todo caso, entablar conversación con él:
- ¿Qué, asesinando, no?
- Aquí estamos
- Pero no se quede usted ahí, hombre, que va a coger un catarro. Máteme en la cama, que estará más cómodo.

Otra reacción estúpida es mirar dentro del armario, que ya es el colmo. Vamos a ver, ¿a alguien le cabe un señor dentro del armario? Pero si el día que planchas no sabes dónde meter tanta ropa ¿cómo se va a meter un tío ahí dentro?

Más reacciones... oyes un ruido raro en casa, te levantas, en calzoncillos, y preguntas:
- ¿Hay alguien ahí?

¿Qué crees? ¿Que si hay alguien te va a contestar?. Pero lo mejor es cuando llegas a la conclusión de que si hay alguien, sólo puede estar detrás de la puerta del cuarto de baño, porque ya has registrado el resto de la casa. ¿Y qué haces? asomar la cabeza poco a poco, más que nada para que si hay alguien, te mate a gustico.
O cuando tienes que bajar al garaje o al sótano y no hay luz. Empiezas a pensar en fantasmas, en asesinos esgrimiendo cuchillos. ¡Muy bien!

Salgamos de los problemas en casa entrar en los de los transportes... vas en un taxi, por ejemplo, y el conductor empieza a correr como si fuese Schumacher. Tú estás cagado de miedo y ¿qué haces?. Lo más lógico e inteligente: te agarras al asita de plástico que hay encima de la puerta. Ya se puede estampar contra un árbol si quiere, que tú vas cogido del asita.
Las mujeres en este caso lo que hacen es agarrarse al bolso y ponérselo delante, como si fuese un airbag.
¿Y cuando vas en bicicleta bajando una cuesta empinada?. Lo único que se te ocurre es quitar los pies de los pedales, sí señor. Y cuando ya la cosa se descontrola del todo, sueltas también las manos del manillar. ¿Acaso crees que vas a salir volando como ET?

En el médico, cuando nos van a poner una inyección ponemos el culo tan duro que la aguja rebota. Sabemos que duele más, pero no podemos evitarlo.

Y es que el miedo nos incita a hacer una idiotez detrás de otra. Vas por la calle y de pronto ves a alguien y piensas que te va a atracar. Me cambio de acera y ya está. ¿Por qué hacemos esto? ¿Es que los delincuentes sólo atracan en una acera?

Lo de los ascensores también tiene delito. Si hace un ruido raro, las mujeres nos agarramos a los hombres, como si ellos no se fueran a caer con todo el ascensor.

¡Qué cosas!

Y ahora a estudiar a little, que ya toca ;)

lunes, 19 de enero de 2009

Los Jefes

Esta mañana, una semana después de la finalización de mi contrato, por fin he firmado el finiquito. El día de la nevada me dijeron que ya me llamarían, pero nada, que no me llamaban. Así que decidí una cosa: si había cobrado, que los dieran por ahí y que me llamaran cuando les diera la gana (que es su responsabilidad), pero si no había cobrado la cosa cambiaría. Y efectivamente, no he cobrado, así que ya me encabroné y decidí llamar yo.
45 minutos más tarde de la hora a la que me habían citado(como me hicieron el día de la entrevista) me han hecho pasar para firmar unos papelajos. Sabía que me iban a pedir la llave de la taquilla y del almacén, pero lo que no sabía es que también me iban a pedir la chapa con mi nombre y...(ojo) los polos!. Harán alrededor de 12.000 euros al día y luego van y me piden los polos. Qué rata nuis.
Tras firmar las cosas, la chica de recursos humanos me ha dado un test para que valore mi estancia en la empresa. Estaba deseando llegar al apartado de mi relación con el jefe cuando, para mi sopresa, veo que todas las opciones son buenas. Así que esa la he dejado en blanco, porque la relación con mi jefa ha tenido más cosas malas que buenas.
Todo esto me ha hecho pensar en esa compleja figura que son los jefes. Esos que dicen que hay jefes majos...mentira cochina. Son tus superiores, y lo peor es que ellos lo saben, así que van a aprovechar cualquier oportunidad que se presente para putearte. Esto es así aquí y en Lima.
Lo que ya no sé es si son cabrones de nacimiento, si de niños eran como el de "La Profecía", o si se van formando poco a poco. Supongo que habrá muchas maneras: se cayeron de cabeza al nacer (o nacieron de culo), los niños de la guardería le quitaban sus juguetes y se los enterraban...quién sabe.
En mi caso, mi jefa era una especialista en sacar de quicio a la gente y en hacer que tengas que morderte el puño para no decir una burrada (o para que ese puño no vaya a parar a otro sitio). No sé si ya lo habré dicho más veces, pero soy una persona muy pero que muy orgullosa, y si hay algo que me jode, es que me traten como si fuera tontica, o como si tuviera dos años. Y sobre todo...con que me digan las cosas una vez es suficiente. Y hay maneras y maneras de decirlas.

Otro rasgo (esta vez negativo) de mi orgullo es que me daba rabia el hecho de tuviera pocos años más que yo (no llega a los 30 ni de coña). Esto me ha hecho pensar, a su vez, en qué haría yo si estuviera en la situación de Dennis Quaid en "In Good Company". Conociéndome como me conozco, no creo que yo, si tuviera 51 años, hubiera soportado tener a un niñato de 26 como jefe. Eso ya es superior a mis fuerzas. Espero no estar nunca en esa tesitura, por Dios.

Por otra parte, mucha gente me dice que si me lo propusiera podría llegar a ser jefa. Vale, es posible que me guste llevar los pantalones, que tenga madera de líder, y que (confieso) sea un poco dominanta, pero yo no quiero ser una cabrona de mayor!

viernes, 16 de enero de 2009

Hoy: pequeña ración de los 70

Ayer, durante mi visionado diario de mis 4 o 5 capítulos de "Aquellos Maravillosos 70" pasé uno de los mejores ratos de mi vida viendo una serie. Si pensaba que tras 5 temporadas no se podían superar, estaba totalmente equivocada.

El número musical de una versión de "So Happy Together":




¿¡Ya estáis cantando otra vez?!...¡Bien! porque...I can't see me lovin' nobody but you...


Aquí se ve claramente cuánto daño hizo la música disco a los videoclips xD:





Y este (del 1:05 al 2:19)...el mejor reencuentro de la historia de la televisión xD.:



La cara de Ashton Kutcher mientras cae...lo puto mejor. Yo pensaba que me meaba encima xD, que crack! Y la canción de los Beach Boys me encanta, jeje.




¿¿Por qué no editarán esta serie en dvd de una vez por todas??


miércoles, 14 de enero de 2009

Cura consumista

Llevamos ya 14 días en este 2009, y en caído en la cuenta de que aún no había hecho recuento de mis compras, como suelo hacer todos los años.

Podría decirse que tengo algo muy parecido al síndrome de Diógenes. No os asustéis, no recojo basura xD. Lo digo porque yo guardo absolutamente todo. No me preguntéis por qué, pero tengo predilección por los tickets y las pegatinas donde pone el nombre y el precio de los artículos que he comprado. Para las pegatinas uso los antiguos albumes que tenía guardados (¿véis? lo guardo todo) de cuando se puso de moda eso de las pegatinas brillantes, hará unos 6 u 8 años.

Mi recuento se centra en lo que más dinero gasto a lo largo del año: películas y libros. Hasta un punto enfermizo. Pero bueno, no es nada malo: hay a quien le da por coleccionar sellos (y se gasta una pasta), hay a quien le da por coleccionar bolsos (como mi madre)...a mí me da por coleccionar pelis. Por lo menos les saco partido, no como los sellos ¬¬
Total, que he estado sumando todos los tickets y me he sorprendido al ver la bajísima cifra que me mostraba la calculadora. Bajísima digo, porque comparada con la del año pasado (299 con algo, sólo en películas) ...no te digo na y te lo digo tó. Quizá me estoy curando de mi enfermedad consumista, o quizá es que, por ahora, mis necesidades cinéfilas están más o menos cubiertas.

Esto es lo que he comprado:





The Salton Sea: 3,45









Casanova: 9,95








Muchachada Nui (1ª Temporada) : 19,95









La Hora Chanante: 19,99










Disturbia: 9,95









Pack Indiana Jones: 57,95 (esto al final me lo compró mi papi, pero lo pongo porque yo tenía en mente pillarmelo)








Bobby: 7,99










Muchachada Nui (2ª Temporada) : 19,95








Total: 149,18



Luego a esto habría de añadirle los gastos extraordinarios que tuve en 2008:


- Los dos discos de The Fratellis



Costello Music: 18,50







Here We Stand: 14,95





- Y la super-tele LCD de 19 pulgadas que me autorregalé por navidad (se me quedó en 226, con mi descuento de empleada). El dvd fue el autorregalo de mi hermano:






Pero vamos, que lo que yo cuento son las pelis. Obviamente, no me compro una tele todos los años xD.
Os parecerá una auténtica chorrada, pero os confieso que a mí me encanta esto de hacer recuento de dvd's a final de año. Es un hobby más xD.
Como dice John Leguizamo en "El Incidente" (la cual se compró ayer mismo mi hermano): "A la gente le gustan las cifras"







martes, 13 de enero de 2009

El mundo en technicolor: Pleasantville

Sigue nevando, y como yo de imaginación no ando nada mal, me da por sacar forzados silogismos. Algunos tan inusitados que a nadie más se le podrían haber ocurrido más que a mi maquinadora cabecita. Hasta yo me sorprendo a veces.
Con la nieve no sólo he establecido el silogismo de "Eduardo Manostijeras"...se me ocurrió otro.
Como aquí en Madrid (casi) nunca nieva me acordé de "Pleasantville", donde el tiempo era siempre perfecto: no hay calor, ni frío, ni humedad...y sobre todo: nunca llueve.

Así que ayer me hice un revisionado de la peli. Es una de esas películas que derrochan optimismo por los cuatro costados, una peli "simpática" podríamos decir.




Pleasantville es un pueblo que se asienta sobre los fuertes cimientos de la rutina y de lo agradable. Donde la única función de los bomberos es rescatar gatitos de los árboles, las amas de casa se reúnen en la cocina para jugar a las cartas, los jóvenes estudiantes llevan a las chicas a la heladería a tomar hamburguesas y refrescos de cereza (y a veces hasta se cogen de la mano!)...y donde el blanco y negro son sinónimos de tranquilidad.



Pero un día aparece una rosa coloreada, a partir de ahí todo empieza a cambiar: los jóvenes descubren lo que hay un paso más allá de simplemente cogerse la mano. Todos los que se sienten bien empiezan a colorearse, los libros se imprimen, aparece el fuego. Pero también aparece el resentimiento y las malas miradas de los habitantes que siguen agarrándose a la rutina y reniegan del cambio. El blanco y negro le planta cara al technicolor (y viceversa)




Si a todo esto le añadimos una brillante fotografía, un guión estupendo, una hermosa banda sonora y, sobre todo, unas excelentes interpretaciones...ya tenemos una de las películas más bonitas e imaginativas de la última década. Una pequeña joya que no puede faltar en la estantería de un cinéfilo.



Junto con la de la lluvia, esta es mi escena favorita:
Budd (Tobey Maguire) le enseña un libro de arte a Bill (Jeff Daniels), al que le encanta la Navidad porque le permite pintar un motivo distinto en el escaparate cada año.
Bill se emociona al descubrir la belleza y la vitalidad que desprenden los colores de las hermosas pinturas de Turner, Van Gogh...





La calidad de una película se nota por pequeños detalles como este: que una escena tan sencilla pueda resultar tan cautivadora, entrañable y emotiva.


sábado, 10 de enero de 2009

Aquella de la que sí hablamos

En la entrada de hace dos días puse una canción y una frase de la (genial) peli "El Bosque". Y no fue por casualidad. Esa misma mañana acababa de comprarle a mi perrita un abriguito nuevo, para que no vaya siempre con el mismo.



De entre todos los modelos elegí una sudaderita polar de color rojo, con su capuchita. Cuando llegué a casa se lo probé, y la primera imagen que se me vino a la cabeza tras verla de espaldas con la capucha puesta fue la de las criaturas (aquellos de los que no hablamos) de "El Bosque". De ahí la canción y la frase de aquella entrada. Ni que decir tiene que está para comérsela con su su nuevo abriguito. A falta de un bebé, yo descargo todo mi instinto maternal y amor por los niños en ella xD.



Y ayer decidí bajarme con ella al parque para que viera la nieve y estrenara el abriguito. Yo le ponía la capucha para que no le cayera nieve en la cabecita, pero a la señora no le gusta y se la quita.




Al igual que yo, Sarita tampoco había visto tanta nieve. En la nevada de 2005 intenté bajarla a la calle, pero en cuanto puso los pies en la nieve se quedó petrificada y no se movió: la tuve que coger en brazos y subirla a casa otra vez.

Ayer, al principio era aún un poco reticente a pisar la nieve, pero luego se acostumbró y resulta que la encanta. Se lo pasaba pipa correteando por ahí. Como es tan pequeña, la nieve la llegaba a la tripita (véase la segunda foto), así que tenía que ir pegando saltitos. Un show



Esto fue dos o tres horas después de mi entrada de ayer. Y como no había parado de nevar, el grosor de la capa de nieve había aumentado de forma considerable de unas fotos a otras. Esta es la visión de mis botas de esquimal hundidas en una capa que rondaría los 30 centímetros:


Tampodo dejó de nevar hasta bien entrada la medianoche. Y hoy, si sales a la calle, corres el riesgo de pegarte un buen culetazo porque ahora la nieve está helada. Pero me da igual, yo pienso salir a las rebajas, jeje. Además seguro que tengo suerte y soy testigo de algún culetazo, porque como decía el señor Coconut: una caída es muy graciosa, ¡eso lo sabe hasta Fidel Castro! si se ha hecho daño o no la persona que se ha caído, da lo mismo. No es óbice para que te rías, si me apuras, es mejor que le haya dolido

Incluso si me caigo yo, con la risa tan tonta y escándalosa (fruto a su vez de ataques de risa de los que oyen la mía) que tengo, no me podré aguantar xD.

PD= Bailé bajo la nieve :D

viernes, 9 de enero de 2009

Nieve

La navidad se resiste a dejarnos, y queda claro con la espesa capa de nieve que ha caido sobre Madrid. La última vez que nevó mas o menos de forma copiosa fue en 2005, pero la de hoy se mea en ella. Nunca en mis 2 décadas de vida (Dios mio, ¿por qué lo habré dicho así? que vieja sooooooy!) había visto tanta nieve.




Esto es lo que se ve desde mis ventanas:







Esta es para que veáis el grosor que tiene la capa. La mesa parece un pastelico, jeje







Así está mi terraza









Se supone que hoy era mi último día de trabajo (a no ser que me renueven :S) pero tal y como está la cosa no voy a poder ir, las líneas de autobuses están suspendidas.

Así que pienso dedicar mi tarde libre a irme por ahí con mi perrita (que tampoco había visto tanta nieve), para que estrene su abriguito nuevo y a hacerla fotos. A hacer muñecos de nieve, a tirar bolas, a echarme al suelo para hacer ángeles, y lo más importante: a bailar bajo la nieve. Al fin, tras tantos años esperando, podré quitarme la espinita.

Edward sigue tallando hermosas figuras en el hielo

Esto no tiene nada que ver, pero bueno. Ayer le volví a hacer un cambio de look a la cabecera del blog y quería pediros vuestra opinión. ¿Cuál os ha gustado más hasta ahora?: la primera (fondo negro y ojos marrones-verdes) la segunda (blanco con ojos azules) o la de ahora?. Personalmente, yo me siento más orgullosa de esta última, jeje

jueves, 8 de enero de 2009

Juguetes viejunos

Estos días nos han estado dando la lata en la tele (sobre todo los de las noticias de Antena 3, que adoran las noticias tontunas...¡cuánta razón tenía Ernesto en aquel consejo de Smonka!) bombardeándonos con reportajes en los que les preguntan a los niños qué han pedido o qué les han traído los Reyes Magos. Los niños contestan, riéndose no saben de qué, y mirando al micrófono fijamente como si fuera éste el que les está haciendo la pregunta (¿qué tendrán los micrófonos que cautivan con semejante pasmo a los niños?). Pero lo que mas pena me da son las respuestas: "la Wii", afirmaba un niño que no llegaría a los 7 años, "un juego para la DS", decía una mocosa que apenas sabía hablar. O en "el mejor" de los casos se piden las "Bratz" esas, o como mierdas se escriba: muñecas cabezonas, maquilladas como puertas, con salchichas bratwurst en lugar de labios, cinturita de avispa y tetazas. Y lo más importante: queridos padres y madres que vayáis a comprar tan (guiño) adecuado (guiño guiño) juguete a vuestras hijas: si no va vestida como un putón verbenero, no es una Bratz. Muñecas como esta tienen la culpa de que este mundo cada vez esté más poblado de chonis.
Esto me ha hecho pensar lo mucho que están degenerando las generaciones, valga la redundancia. El otro día hablaba de ello (con Sally, si mal no recuerdo ;) ), y es realmente alarmante. Parece una tontería, pero en el fondo se nota bastante: mi generación (o las anteriores, los que ya pasan de los 20) nos criamos con series tan bonitas como "Barrio Sésamo", "Los Mosqueperros", "La Vuelta al Mundo de Willy Fog", etc...
¿Con qué se crían los niños de ahora? con esas mierdas de "Los Lunnis" y demás tonterías de la misma calaña. Muñecos feos que a mí, una chica de 20 años, me dan cosica, así que imaginaros a un niño pequeño (eso de Cuatro, "Los Algos", me dan directamente escalofríos).
Hasta la factoría Disney ha degenerado: a nosotros nos hizo disfrutar con películas preciosas, los llamados "Clásicos": "Peter Pan", "La Bella y la Bestia", "El Rey León", "Los Aristogatos", "Blancanieves"...a los niños de ahora los (guiño) educa (guiño guiño) con cosas como "Hannah Montana" o "High School Musical". Bien por Disney! sí señor!. Si el amigo Walt levantara la cabeza (o saliera del cubito de hielo)...
Y cuando estas (guiño) adorables criaturas (guiño guiño) pasan a una edad más avanzada podrían redimirse y madurar, pero ya están ahí programas como "Gran Hermano", el "SmackDown" o series como "Física o Química", "18", "Sin Tetas no hay Paraíso"... para impedirlo.
Sé de lo que hablo: tengo un primo de 12 años que ya va camino de convertirse en todo un quinqui.
Todo esto al llegar a los 15/16 años. Ya no quiero ni pensar cómo serán cuando crezcan. Y lo peor es que a mí me va a dar tiempo a verlo. La que digo...yo tendría que haber nacido en los 60...


Nosotros hemos pasado gran parte de nuestra infancia sin consolas, ni móviles, ni internet, y nos lo pasábamos pipa (por lo menos yo). Yo era feliz con mis Barbies, mis Barriguitas y mis Cocolines, aunque también con los Lego y los Playmobil de mi hermano. Éste estuvo indagando el otro día y encontró algunos juguetes de cuando eramos pequeños. A saber:



- El Castillo de Playmobil (aquí metíamos al Hamster de mi primo Quini, ¡no se quejaría de casa! y si mi madre no lo hubiera regalado, ahora mi Piticli viviría como un rey xD)




- El Circo de Playmobil








- La fortaleza de Lego (con su catapulta)



- El Velociraptor y el Tyrannosaurus de "Parque Jurásico" (hacían ruidicos, aún conservamos el Rex a modo de adorno)




- Optimus Prime (Dios, me pasaba las horas muertas montándolo en coche y desmontándolo xD) y Megatron








- Y el Tejenova (éste era sólo mío, a mi hermano no le hacía mucho tilín xD). Anda que no me lo pasaba yo bien haciendome mis bufandicas y también alguna colcha para las Barbies





Si hoy en día hicieran juguetes como estos volvería a escribir la carta!

No quería dejar pasar la oportunidad de decir, sin asomo de sonrojo, que soy una firme detractora de los Reyes Magos. ¿Por qué? porque implican el fin de la Navidad y porque estoy americanizada, así que...ARRIBA PAPÁ NOEL!

sábado, 3 de enero de 2009

Toledo here we go (II)

Pues ya era hora de que publicara una entrada para inaugurar el nuevo año en el blog!


En la entrada del día 19 dije que en cualquier día de estas navidades iría a Toledo...y efectivamente fui ayer, lo que, tras 3 años, ya se ha consolidado como la mejor tradición navideña.
Y también, tras 3 años, sólo tuve que tirar de mi desquajaringado y pintarrajeado plano (del 2005, que ha soportado arrugones, roturas y chaparrones no sin cierto deterioro) 4 veces contadas. Y es que ya me conozco sus hermosas calles y rutas casi de memoria.

A continuación vienen algunas fotos (de las 280 que hicimos, hemos batido el record) con su correspondiente pie de página (como en los libros del cole, jeje):



- El puente de Alcántara y el Alcázar de fondo. Es la primera parada que hacemos tras bajar de la estación. Tuvimos que esperar a que pasaran los cientos de guiris con los que compartimos AVE para que no nos deslucieran demasiado la foto:





- La Puerta Nueva de Bisagra. Aquí el odioso sol hizo de las suyas y nos estropeó el encantador día toledano (nubes muuuuy grises y mucho frío, me encanta!) y también la foto. Menos mal que luego volvió a irse a tomar por...ejem...y volvió a estar todo el día nublado hasta que anocheció:






- Vista preciosa de la catedral y del alcázar, desde las torres de la iglesia de los Jesuitas. Esa iglesia es otra de nuestras habituales paradas. Podría decir que es una paliza bastante considerable subir a las torres (sobre todo cuando tienes a un pesado que viene justo detrás y no te puedes parar a descansar, con lo que llegas arriba del todo practicamente en estado catatónico) pero, habiendo subido a las de Notre Dame de París...las de los Jesuitas son un paseo:




- La catedral. Joder, me parece más y más bonita cuando la veo de un año para otro. No me canso de mirarla, ni tampoco de fotografiar cada detalle (defecto profesional de una estudiante de historia del arte ante su catedral española favorita):





- La catedral por dentro. Hermosa y espectacular hasta rabiar!. Sólo pudimos visitar un pequeño recinto, ya que si queríamos visitar la catedral entera teníamos que pagar 7 eurazos. Así que entramos por la puerta denominada "de culto" (para la gente que va a misa) y ya está. Justo cuando estaba a punto de sacar una última foto antes de irnos, me dijo uno de los vigilantes que estaba prohibído hacer fotos...¡a buenas horas! ya llevaba 23:




- Y la catedral iluminada, ya cuando empezaba a anochecer. Qué decir de ella!:







- Y el puente de Alcántara y el alcázar one more time, iluminados:







Todo esto por poner algunas fotos, de los lugares más conocidos. Me dejo la infinidad de iglesias, exposiciones y lugares de diversa índole que visitamos (fue sin duda el año más prolífico hasta ahora). Nos quedamos con las ganas de vistar la iglesia de Santo Tomé, donde está "El Entierro del Conde de Orgaz", de El Greco. No es que sea mi cuadro favorito, al contrario, los cuadros de El Greco me dan cosica, pero no sé, una (a veces pedante) amante de la historia del arte no puede resistirse a un cuadro de semejante envergadura. Total, que lo fuimos dejando para más tarde hasta que nos cerraron la iglesia xD.




- Mención aparte merece la famosa "calle Corso", de la que ya hablé en la otra entrada. Su nombre auténtico es "calle Buzones", pero nosotros la bautizamos así porque fue una de las localizaciones donde se rodó de la parte toledana de la peli "La Novena Puerta" (peli que me encanta, dicho sea de paso) protagonizada por Johnny Depp.


Antes de ir por segundo año consecutivo me volví loca buscando por internet información para descubrir en qué calle de todo Toledo se había rodado la escena, y al final dí con ella. Una vez dimos con ella...encontrarla, para mí, es otro paseo xD:







- Billetes del AVE a Toledo (ida y vuelta): 14 euros
- Comida en un restaurante del Zocodover: 12 euros
- Bolsita de delicioso mazapán artesano: 3 euros
- Pisar la misma calle que ha pisado Johnny Depp: no tiene precio